1) Además de las comorbilidades conocidas asociadas a la artritis reumatoidea como la hipertensión, diabetes , hipotiroidismo , tabaquismo, dislipemia, osteoporosis , actualmente hay estudios que marcan a la depresión, la obesidad y la enfermedad cardiovascular como patologías asociadas a un peor pronóstico de la artritis reumatoidea, pudiendo aumentar la mortalidad de los pacientes.
En el caso de la depresión, hay citoquinas proinflamatorias relacionadas con esta enfermedad,
También se conoce el papel del tejido adiposo como un auténtico generador de inflamación, ya que los adipocitos (células del tejido adiposo) liberan continuamente proteínas que favorecen la inflamación.
La inflamación es un factor de riesgo para las enfermedades cardiacas. No solo contribuye al deterioro de los vasos sanguíneos, sino que se ha demostrado que los pacientes con artritis reumatoide presentan mayor mortalidad cardiovascular que la población de la misma edad y el mismo sexo.
2) EL CONTROL SE PUEDE REALIZAR POR MEDIO DE LA PREVENCIÓN tomando medidas para combatirlas: menú saludable, actividad física, no fumar, controlar el azúcar y la sal, reducir el stress. El paciente con artritis debe realizar sus controles periódicos , como dice su reumatólogo y su DETECCIÓN PRECOZ puede permitir tanto su tratamiento, como, especialmente en el caso de la enfermedad cardiovascular, prevenir que se produzcan eventos clínicos que pueden llegar a comprometer la vida del paciente.
MANEJO PERIOPERATORIO DE TERAPIA ANTIRREUMATICA
Es una decisión difícil si se suspende o no la medicación. La mayor dificultad reside en lograr un equilibrio entre el control de la enfermedad y optimizar la cicatrización y reducir al mínimo el riesgo de infección.
La susceptibilidad a la infección está determinada por la terapia inmunosupresora, la enfermedad autoinmune y las enfermedades asociadas, por lo que se debe controlar las
COMORBILIDADES (HIPERTENSIÓN ARTERIAL – DIABETES).
El uso prolongado de CORTICOIDES suprime el eje hipotalámico-pituitario-adrenal, por lo que la suspensión en el perioperatorio puede ser grave pero a la vez la administración excesiva predispone infecciones y empeora la cicatrización.
Aunque un gran número de pacientes pueden no necesitar terapia suplementaria durante el perioperatorio, administrárselas a todos es más factible y más costo efectiva cuando se sospecha de supresión del eje.
ENTONCES, Recordar que si el tratamiento incluye CORTICOIDES, ANITINFLAMATORIOS NO ESTEROIDEOS, DROGAS ANTIRREUMATICAS MODIFICADORAS DE LA ENFERMEDAD (DMARD) como el METOTREXATO , LEFLUNOMIDA ,SULFASALAZINA , AZATIOPRINA , HIDROXICLOROQUINA y DROGAS BIOLÓGICAS DEBE consultar al reumatólogo quien dará su recomendación. Los cambios dependen de las distintas drogas y su vida media.